Irán: derechos lejos de los humanos

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Irán: derechos lejos de los humanos

Miles de personas han sido interrogadas, procesadas injustamente y/o detenidas arbitrariamente sólo por ejercer pacíficamente sus derechos humanos, y cientos más permanecen injustamente encarceladas. Las fuerzas de seguridad utilizan ilegalmente la fuerza letal y el tiro de pájaros para aplastar las protestas. Las mujeres, las personas de la comunidad  LGBTTTIQA+, las minorías étnicas y religiosas se enfrentan a una discriminación y violencia arraigadas. Los derechos humanos en Irán están más comprometidos que nunca.

Un presente iraní que supera la violación de derechos humanos del pasado

Los acontecimientos legislativos socavan aún más los derechos sexuales y reproductivos, el derecho a la libertad de religión y creencias y el acceso a Internet. La tortura y otros malos tratos, incluida la denegación de la atención médica adecuada a los prisioneros, siguen siendo generalizadas y sistemáticas. Las autoridades no garantizan el acceso oportuno y equitativo a las vacunas contra la Covid-19. Se imponen castigos judiciales de flagelación, amputaciones y cegamiento. 

La pena de muerte se ha utilizado ampliamente, incluso como arma de represión. Las ejecuciones se han llevado a cabo después de juicios injustos. La impunidad sistémica prevalece para los crímenes de lesa humanidad pasados y en curso relacionados con las masacres de prisiones en 1988 y otros crímenes de derecho internacional.

Estas situaciones claramente anti humanitarias no surgieron de forma gratuita, para entenderlo hay que voltear la vista a un pasado no muy lejano, hablemos de la segunda mitad del siglo XX.

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El ex jefe del poder judicial de Irán, Ebrahim Raisi, ascendió a la presidencia en junio en lugar de ser investigado por crímenes de lesa humanidad relacionados con las desapariciones forzadas masivas y las ejecuciones extrajudiciales de 1988, lo que refleja la impunidad sistémica en Irán.

Las elecciones presidenciales se celebraron en un entorno represivo con una participación marcadamente baja. Las autoridades prohibieron a las mujeres, los miembros de las minorías religiosas y los críticos postularse, y amenazaron con procesar a cualquiera que alentara el boicot electoral.

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Irán en problemas que involucran todas las áreas de desarrollo

En los últimos años, tenemos sanciones en curso por parte de EE. UU., el COVID-19 y la corrupción profundizaron la crisis económica de Irán, caracterizada por una alta inflación, pérdidas de puestos de trabajo y salarios bajos o no pagados. Las huelgas y manifestaciones marcaron el año, ya que las autoridades no priorizaron los salarios adecuados, la vivienda, la atención médica, la seguridad alimentaria y la educación en los presupuestos públicos.

Los expertos en medio ambiente criticaron el fracaso de las autoridades para abordar la crisis ambiental de Irán, marcada por la pérdida de lagos, ríos y humedales; la deforestación; la contaminación del agua por aguas residuales brutas y los residuos industriales; y el hundimiento de tierras.

Irán continuó proporcionando apoyo militar a las fuerzas gubernamentales en el conflicto armado en Siria. En febrero de 2019 un tribunal belga condenó al diplomático iraní Assadollah Asadi a 20 años de prisión por su papel en un ataque con bomba frustrado contra un mitin de un grupo de la oposición iraní exiliado en Francia en 2018.

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En marzo de 2020, el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas renovó el mandato del Relator Especial sobre Irán. Las autoridades le negaron la entrada a Irán, a otros expertos de la ONU y a observadores independientes.

Ser mujer en Irán, una sentencia de abusos y muerte

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Las mujeres se enfrentaron a la discriminación en la ley y la práctica, incluso en relación con el matrimonio, el divorcio, el empleo, la herencia y el cargo político.

Las leyes discriminatorias de velo obligatorio llevan al acoso diario, la detención arbitraria, la tortura y otros malos tratos, y la denegación de acceso a la educación, el empleo y los espacios públicos. Al menos seis defensoras de los derechos de las mujeres permanecieron encarceladas por hacer campaña contra el velo obligatorio.

El Parlamento socavó aún más el derecho a la salud sexual y reproductiva al adoptar el proyecto de ley "Moción joven y protección de la familia" en noviembre, que, entre otras cosas, prohíbe a las instalaciones financiadas por el estado proporcionar control de la natalidad de forma gratuita; requiere que las farmacias vendan anticonceptivos sólo con receta médica y prohíbe la vasectomía.

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La Comisión Social parlamentaria aprobó el proyecto de ley de larga data "Defender la dignidad y proteger a las mujeres contra la violencia" en julio después de las enmiendas regresivas del poder judicial. El proyecto de ley, que esperaba la aprobación final, contiene disposiciones bienvenidas, incluido el establecimiento de unidades policiales especiales, casas seguras y un grupo de trabajo nacional para diseñar estrategias para abordar la violencia contra las mujeres y las niñas. Sin embargo, no define la violencia doméstica como un delito separado, penaliza la violación conyugal y el matrimonio infantil, ni garantiza que los hombres que asesinan a sus esposas o hijas se enfrenten a castigos proporcionales. En casos de violencia doméstica, el proyecto de ley prioriza la reconciliación sobre la rendición de cuentas.

La edad legal de matrimonio para las niñas se mantuvo en 13 años, y los padres podían obtener permiso judicial para que sus hijas se casaran a una edad más temprana. Según las cifras oficiales, entre marzo de 2020 y marzo de 2021 se registraron los matrimonios de 31.379 niñas de entre 10 y 14 años, lo que representa un aumento del 10,5% con respecto al año anterior.

Al mismo tiempo, un número creciente de personas, incluidas celebridades iraníes y deportistas que han expresado su apoyo a las protestas, han sido llamados a interrogatorios o arrestados.

Es importante recordar y hacer saber a las autoridades iraníes que, en virtud del derecho internacional de los derechos humanos, tienen la obligación de respetar y garantizar los derechos a la reunión pacífica y a la libertad de expresión.

Llamado de atención para Irán y el mundo

La comunidad internacional tiene el reto de llevar a cabo un llamamiento a las autoridades para que liberen a todos los detenidos en relación con el ejercicio de sus derechos, incluido el derecho a la reunión pacífica, y que retiren los cargos en su contra. También, ser conscientes que el que las autoridades iraníes impongan inmediatamente una moratoria sobre la pena de muerte y que revoquen las sentencias de muerte emitidas por delitos que no califican como los delitos más graves según el derecho internacional, es un acto humanitario que concierne a cada ser en el planeta.

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