¿Es que las mujeres no podemos ser genias? Enseñar arte desde la perspectiva de género

Published:

Tags: Arte educación igualdad mujeres artistas feminismo

¿Es que las mujeres no podemos ser genias? Enseñar arte desde la perspectiva de género

 

Autora: Carmen V. Valiña. Doctora en Historia Contemporánea y Licenciada en Humanidades. Creadora y directora de https://perifericas.es/ Escuela online de feminismos alternativos

¿Alguna vez te has preguntado por qué solo hay hombres en las historias del arte que te han enseñado? ¿O por qué la inmensa mayoría de los artistas de los grandes museos nacieron en Europa? ¿Es que las mujeres, y particularmente las mexicanas, no tenían talento suficiente como para formar parte de esa historia? Este tipo de cuestiones no suelen aparecer cuando estudiamos a pintores o escultores de renombre, pero es clave plantearlas para entender las lagunas que la enseñanza de la historia del arte sigue presentando, y sobre todo, para plantear alternativas.

El predominio occidental en el mundo del arte ha quedado patente durante siglos con la creación de un sistema dividido entre unos espacios dominantes ubicados en Europa y Estados Unidos y un “Sur global” dominado, que incluye tanto el espacio geográfico que queda fuera de Occidente como los colectivos ubicados en los márgenes del propio sistema occidental (personas racializadas, clases no dominantes…). Frente a un Occidente que crea significados y representaciones, el resto de colectivos carecen de capacidad de enunciarse en sus propios términos.

A las mujeres les fue negado el acceso a las enseñanzas artísticas profesionales hasta el siglo XIX

Junto al eurocentrismo del arte, el androcentrismo a él asociado provoca que las mujeres queden fuera del cuadro, máxime cuando se trata de ciertos colectivos femeninos ubicados en los márgenes del sistema. Es el caso de las mujeres indígenas en México, cuyas representaciones se han movido entre la cosificación (presentándolas como meros objetos pasivos para la mirada masculina) y el racismo (primero dentro del México dominado por España y luego con la creación de un Estado independiente que las siguió manteniendo en un segundo plano). Las consecuencias para ellas son su eliminación como artistas y como representadas, incluso barriendo sus propios referentes prehispánicos, y su consiguiente ubicación en los márgenes del sistema, lo cual dificulta su acceso a museos y exposiciones y hace muy complejo que su producción artística pueda despuntar.

Fundamentalmente a partir de los años noventa, con el auge de los feminismos decoloniales en gran parte del mundo, distintas artistas mexicanas indígenas han reivindicado la necesidad de recuperar los referentes propios y crear una imagen de sí mismas que no esté modelada por otros, sino que sea creada desde sus propias narrativas, preocupaciones y reivindicaciones. Así lo han hecho la fotógrafa zapoteca Martha Toledo o la directora de documentales chatina Yolanda Cruz.

María Izquierdo es una de las pintoras mexicanas más célebres, pero su trabajo sigue estando al margen de la enseñanza de la historia del arte más convencional

La invisibilización femenina en museos y galerías tiene su plasmación asimismo en el ámbito educativo, donde más allá de nombres claves como los de Frida Kahlo, el arte mexicano hecho por mujeres sigue siendo apenas conocido más allá de las fronteras del país. El alumnado que se acerca a este tipo de conocimientos en el nivel preuniversitario o en la universidad probablemente desconoce a otras creadoras sin las cuales la historia del arte mexicano no estaría completa, como María Izquierdo, Remedios Varo o Leonora Carrington, que siguen siendo cuasi anónimas, y más todavía las que, desde las últimas décadas del siglo XX, hicieron del feminismo bandera de su arte, como  Mónica Mayer y Maris Bustamente.

Para enseñar una historia del arte que combata todos esos sesgos euro y androcéntricos la toma de conciencia acerca de la perspectiva de género es fundamental. Comenzamos este artículo con algunas preguntas y lo finalizamos con otras: ¿sabías que el acceso a las academias de arte estuvo cerrado para las mujeres hasta el siglo XIX? ¿Alguna vez te han hablado de Sofonisba Anguissola o de  la mexicana Nahui Olin? Y, sobre todo, ¿te habrías animado a pintar si desde la infancia te hubiesen enseñado que  tu sitio es el hogar y que solo los hombres pueden ser genios?

Suscríbete al newsletter